¿Cómo supervisar adecuadamente a un niño en la piscina?
Llega el calor y con él se multiplican los momentos de ocio familiar en las piscinas. Los más pequeños de la casa se lo pasan en grande jugando y divirtiéndose mientras se refrescan. Sin embargo, los adultos siempre andamos preocupados por su seguridad y atentos para que para que ningún accidente se produzca, ¿cómo podemos estar seguros mientras acompañamos a nuestros hijos, sobrinos o nietos en la piscina?
Abrisud presenta un completo decálogo con una serie de consejos útiles para que los adultos lleven a cabo una adecuada supervisión de los niños mientras estos disfrutan de la piscina. Explicado de una forma sencilla a través de unas viñetas en Pixel Art, los mayores de la casa podremos saber qué medidas de seguridad adoptar para nuestra tranquilidad y la de los nuestros.
Prevención
Lo primero que debemos establecer es una supervisión continua de los peques. No quitar los ojos de encima de los niños es una medida fundamental para evitar sustos. Esta vigilancia podemos llevarla a cabo junto a más adultos, así estableceremos turnos que nos permitan un control total y también nos ofrezca tiempo para nuestro propio descanso y relax. En los menores de 5 años lo aconsejable es practicar la llamada “supervisión al tacto”, es decir, que el menor este al menos al alcance de nuestro brazo en todo momento.
En cuanto a los elementos de flotación con los que debemos equipar a nuestros pequeños hemos de recordar que chalecos y manguitos son los más comunes pero debemos vigilar que estén homologados y proporcionen la información necesaria para hacer un buen uso de ellos.
Antes de abandonar la piscina también debemos tener en cuenta algunos elementos. Los juguetes que hemos usado en la piscina durante nuestro tiempo de baño pueden llamar la atención de otros niños que para conseguirlos pueden lanzarse al agua a por ellos. Por ello, es aconsejable que recordemos retirarlos una vez los peques hayan terminado de jugar.
Además, los niños en ningún caso deben poder acceder solos a nuestra piscina. Realizar el mismo recorrido que hacen los niños nos ayudará a detectar riesgos. Es importante para evitar este tipo de accidentes que las piscinas cuenten con elementos de seguridad como vallas o cubiertas que pueden evitar que los niños entren solos en la piscina.
Educación
Si prevenir es importante, que los niños cuiden su propia seguridad con una adecuada educación es otro de los ejes de unos baños felices y tranquilos. Aprender a nadar y enseñar a los peques que pueden hacer y que no en la piscina servirá para disminuir los riesgos. Bajo ningún concepto pueden correr en las piscinas ya que las zonas resbaladizas podrían provocar caídas, no pueden saltar sobre otros niños o jugar con los drenajes. Entender el peligro de estas acciones es muy importante para minimizar riesgos.
Emergencias
Es recomendable que dispongamos de un equipo de rescate básico que conste de boya o salvavidas de repuesto, así como una pértiga y un teléfono con el que poder llamar a emergencias en caso de necesitarlo. Para facilitar una respuesta lo más rápida posible un buen consejo es colocar un cartel cerca de la piscina con los teléfonos de Emergencias, Policía Nacional, Guardia Civil, Policía Local e Información Toxicológica.
Este es nuestro recopilatorio de consejos sencillos para que este verano sea de lo más refrescante, sin riesgos y seguro para los pequeños de la casa. Si te apetece saber más descarga nuestro decálogo de seguridad para adultos.
