En el parque natural de la Sierra de Espuña, en Murcia, se halla un antiguo molino harinero convertido en hotel con mucho encanto. Su ubicación en un cejo, al borde de un acantilado, le convierte en un espejismo. Parece increíble que pudiese construirse un molino en esa superficie.
A esta ubicación improbable se une unas maravillosas vistas a un manantial. El hotel está decorado con el estilo tradicional de la sierra murciana serrana y pequeños detalles contemporáneos.
El hotel cuenta con restaurante propio y piscina, realizada con moles de roca caliza.
Una recomendación de www.abrisud.es