Este próximo domingo 5 de marzo de 2022 es el día internacional de la eficiencia energética y desde Abrisud hemos querido compartir algunas indicaciones para llevar a cabo un uso y mantenimiento óptimo de las piscinas, tanto residenciales como profesionales.

A los nuevos propietarios, les recomendamos tener en cuenta el Reglamento de Instalaciones Térmicas (RITE) a la hora de construir una piscina: la temperatura del vaso de una piscina climatizada se debe mantener entre 24ºC y 30ºC y la temperatura del aire entre 1°C y 2°C por encima. Por otro lado, la humedad relativa del espacio debe ser siempre inferior al 65% para evitar la condensación.

Por otra parte, hay que mantener una tasa de recirculación de aire adecuada y recuperar la energía térmica que contiene el aire evacuado al exterior mediante recuperadores de calor. Para calentar el agua de la piscina, el reglamento obliga a aprovechar la energía solar, con una contribución solar mínima anual que debe ser entre un 30% y un 70%, en función de la zona del país. Si la energía del sol no es suficiente, entonces se dispondrá de calderas, bombas de calor o cubiertas de piscina, para mantener la temperatura del agua y evitar la evaporación, que puede suponer un coste de hasta 300/400 L al día, según las dimensiones y ubicación de la instalación.

Para el correcto mantenimiento de una piscina residencial, recomendamos:

  • Conservar el agua de la piscina 5 temporadas
  • Instalar sistemas de acceso que eviten las pérdidas de calor al exterior de la piscina.
  • Realizar un correcto mantenimiento de la instalación (limpieza de conductos, del quemador de la caldera, revisión de los sistemas de tratamiento de agua, comprobación de niveles de agua en circuitos, revisión y limpieza de filtros, etc.)
  • Utilizar fuentes de energía fotovoltaica.
  • Controlar la iluminación del recinto.
  • Adecuar el funcionamiento de las instalaciones al número de usuarios y las condiciones ambientales
  • Vigilar el consumo de energía de las instalaciones auxiliares: vestuarios, salas de control, etc.

Todas estas indicaciones permiten realizar un uso eficiente de las piscinas. “El uso de una cubierta de piscina es el sistema más eficiente para reducir la huella de carbono, no en vano reduce hasta un 80% la evaporación del agua, permitiendo un ahorro energético de entre el 50% y el 70%” detalla Fabrice Villa, nuestro director ejecutivo.

Todas nuestras cubiertas residenciales disponen de la posibilidad de utilizar energía fotovoltaica, para realizar un consumo con menor impacto ambiental.

En el caso de las piscinas de grandes dimensiones de hoteles o campings, nuestras recomendaciones son: realizar un control adecuado del consumo del agua; mantener el nivel de agua adecuado para que el sistema de recirculación funcione correctamente y revisar posibles problemas de estanqueidad y de fugas tanto en la infraestructura de la piscina como en las uniones y conducciones de agua.

La instalación de una cubierta de piscina en un hotel o camping supone un aumento de la rentabilidad de entre un 20% y 30%, tanto por el incremento de usuarios, como por un uso más eficiente de la instalación.

Una noticia de www.abrisud.es